Un grupo de investigadores informa de que la vacunación masiva de perros en una ciudad africana resultó en la interrupción con éxito de la transmisión de la rabia durante nueves meses en 2014. Los investigadores sostienen que los resultados obtenidos demuestran que las vacunas disponibles actualmente pueden detener la propagación de la rabia, siempre y cuando las comunidades locales estén informadas y comprometidas con la medida. A pesar de que las vacunas para perros funcionan bien, más de 50 000 personas mueren cada año tras contraer rabia de un cánido. Este problema es más grave en África y Asia, donde algunas personas no pueden afrontar el gasto de vacunar a sus propias mascotas, por lo que dependen de campañas masivas de vacunación gratuita. Con el objeto de comprender mejor los factores sociales y ecológicos que determinan si una vacunación masiva tendrá éxito o no, Jakob Zinsstag et al. analizaron la transmisión de la rabia en Yamena (capital del africano país de Chad) después de dos campañas que tuvieron lugar en 2012 y 2013. En ambas campañas, se vacunó a aproximadamente un 71 % de todos los perros de la ciudad en cada año y el análisis de los científicos reveló que no hubo nuevos casos de perros infectados de rabia hasta noviembre de 2014. Además, los casos de transmisión de rabia perro-humano fueron inferiores a una persona por millón durante los nueve meses posteriores a la campaña de vacunación. Si bien sí hubo un aumento antes de lo esperado en la transmisión de la rabia tras la campaña en Yamena, el análisis de los genomas virales indicó que los casos nuevos llegaron a la ciudad a través de perros domésticos que vivían en áreas semiurbanas de los alrededores de la capital. Los autores sugieren que las futuras campañas de vacunación contra la rabia canina deberían tener un mayor alcance --de manera que incluyan áreas suburbanas y periféricas-- para detener la transmisión en los centros urbanos.
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Journal
Science Translational Medicine