Según un nuevo estudio, la gestión local de los arrecifes de coral para aliviar los factores de estrés ambiental, como la sobrepesca o la contaminación, podría incrementar las posibilidades de recuperación de los arrecifes tras los devastadores eventos de blanqueamiento del coral causados por el cambio climático. Los resultados sugieren que cuidar los arrecifes a escala local podría ayudarlos a persistir a nivel mundial. Cuando las aguas se calientan, los corales pueden morir rápidamente y en masa en eventos de blanqueamiento del coral. El calentamiento marino debido al cambio climático ha provocado un fuerte aumento tanto en la frecuencia como en la magnitud de estos eventos de mortalidad masiva, que ya han causado graves daños a los arrecifes de todo el mundo. Debido a la naturaleza global del blanqueamiento del coral, muchos estudios sostienen que mitigar el cambio climático es la única forma de garantizar la supervivencia de estos sensibles ecosistemas. Sin embargo, ocasionalmente los corales supervivientes logran recuperarse tras los eventos de blanqueamiento y los arrecifes se restablecen. Se desconoce si las estrategias locales de gestión de arrecifes desempeñan algún papel en esta resiliencia. Mary Donovan y sus colegas evaluaron datos de 223 arrecifes de coral de todo el Caribe y el Indo-Pacífico y encontraron que la pérdida de coral un año después del blanqueamiento presentaba una fuerte correlación con aspectos de la salud del arrecife, específicamente la abundancia de erizos de mar y macroalgas, que son indicadores de sobrepesca y contaminación. Según estos hallazgos, los arrecifes gestionados localmente, en los que los factores de estrés humano se redujeron al mínimo, obtuvieron mejores resultados que los arrecifes no gestionados. Si bien quedan por descubrir los mecanismos que sustentan esta resiliencia, Donovan et al. argumentan que, además de los esfuerzos para reducir las emisiones globales de carbono, la gestión local es crucial para ayudar a los arrecifes de coral a sobrevivir al Antropoceno. "Durante las próximas negociaciones globales, los gobiernos deben recordar que, además de establecer ambiciosos objetivos para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, una estrategia importante para reducir los impactos negativos del cambio climático es empoderar a las comunidades locales para gestionar los arrecifes y otros recursos marinos", escribe Nancy Knowlton en un artículo de Perspective relacionado.
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