Las olas de calor marinas de 2023 no tienen precedentes y podrían indicar un punto de inflexión climático

Según un nuevo estudio, las olas de calor marinas (OCM) globales de 2023 no tuvieron precedentes en cuanto a intensidad, persistencia y escala. Los hallazgos proporcionan información sobre los factores específicos de cada región que provocan estos fenómenos, relacionándolos con cambios más amplios en el sistema climático del planeta. También pueden presagiar un punto de inflexión climático emergente. Las olas de calor marinas (OCM) son episodios intensos y prolongados de temperaturas oceánicas inusualmente cálidas. Estos fenómenos suponen una grave amenaza para los ecosistemas marinos, ya que a menudo provocan la decoloración generalizada de los corales y la muerte masiva de especies. Además, tienen graves consecuencias económicas al perturbar la pesca y la acuicultura. Es ampliamente reconocido que el cambio climático provocado por el ser humano está impulsando un rápido aumento de la frecuencia y la intensidad de las MHW. En 2023, regiones de todo el mundo, incluyendo el Atlántico Norte, el Pacífico Tropical, el Pacífico Sur y el Pacífico Norte, experimentaron OCM extremas. Sin embargo, las causas subyacentes al inicio, la persistencia y la intensificación de las OCM generalizadas siguen sin conocerse bien.

Para comprender mejor las OCM de 2023, Tianyun Dong y sus colegas llevaron a cabo un análisis global utilizando observaciones satelitales combinadas y datos de reanálisis oceánico, incluidos los del proyecto de alta resolución ECCO2 (Estimación de la circulación y el clima del océano, fase II). Según los resultados, las OCM de 2023 batieron nuevos récords de intensidad, duración y extensión geográfica, con una duración cuatro veces superior a la media histórica y una cobertura del 96 % de la superficie oceánica mundial. A nivel regional, el calentamiento más intenso se produjo en el Atlántico Norte, el Pacífico Tropical Oriental, el Pacífico Norte y el Pacífico Suroccidental, que en conjunto representaron el 90 % de las anomalías de calentamiento oceánico. Dong y sus colegas muestran que la OCM del Atlántico Norte, que comenzó a mediados de 2022, persistió durante 525 días, mientras que el evento del Pacífico Suroccidental batió récords anteriores por su gran extensión espacial y su prolongada duración. Además, en el Pacífico tropical oriental las anomalías de temperatura alcanzaron un máximo de 1,63 grados centígrados durante el inicio de El Niño. Mediante un análisis del balance térmico de la capa mixta, los autores descubrieron diversos factores regionales que contribuyen a la formación y persistencia de estos fenómenos, entre ellos el aumento de la radiación solar debido a la reducción de la cobertura nubosa, el debilitamiento de los vientos y las anomalías en las corrientes oceánicas. Según los autores, las OCM de 2023 podrían marcar un cambio fundamental en la dinámica océano-atmósfera, lo que podría servir como una alerta temprana de que se aproxima un punto de inflexión en el sistema climático de la Tierra.